El certificado WELL y su significado en los edificios con SATE

Certificado well

La eficiencia energética y la apuesta por la sostenibilidad se han convertido en dos factores esenciales en el sector de la construcción. No obstante, además de estas dos preocupaciones, hay una tendencia emergente que está cobrando cada vez más protagonismo: la calidad del ambiente interior y la salud y bienestar de los ocupantes. 

En esta última necesidad se centra el Certificado WELL; una normativa que prioriza la salud y el bienestar de las personas en los edificios, promoviendo entornos interiores óptimos para fomentar el confort y la productividad de todas las personas del interior.

¿Cómo se complementan las dimensiones que se tienen en cuenta en la certificación WELL con los aspectos de eficiencia energética y rendimiento tan característicos de los edificios con SATE? Te lo contamos: 

Nueva llamada a la acción

¿Qué es la certificación WELL?

El certificado WELL fue desarrollado por el International WELL Building Institute (IWBI) y se basa en la premisa de que el ambiente construido tiene un impacto significativo en la salud y el bienestar de los ocupantes.

Así, la certificación WELL es un sistema de calificación utilizado en el sector de la construcción para evaluar el grado en que un edificio contribuye al bienestar físico y mental de las personas que lo ocupan. 

A diferencia de otras certificaciones utilizadas para medir edificios sostenibles como la certificación LEED; centrada principalmente en la eficiencia energética y el impacto ambiental, el Certificado WELL está diseñado para abordar aspectos que influyen directamente en la salud y el confort de las personas. 

De esta manera, la certificación WELL tiene en cuenta 7 categorías diferentes. Cada concepto está compuesto por múltiples características relacionadas con la salud, el confort y el conocimiento de los ocupantes. A su vez, cada característica se divide en partes, ajustándose así a un tipo específico de edificio al determinar los parámetros o las métricas específicas que se deben cumplir.

Las 7 claves que tiene en cuenta la certificación WELL son: 

  • Aire: Se centra en la calidad del aire interior, la reducción del nivel de contaminantes y la promoción de una buena ventilación. 

  • Agua: Incentiva el acceso a agua potable de calidad y la optimización del consumo de agua. 

  • Nutrición: Fomenta una alimentación saludable, así como opciones nutricionales dentro del espacio construido. 

  • Iluminación: Busca maximizar la entrada de luz natural y optimizar la iluminación artificial para favorecer el bienestar y el ritmo circadiano. 

  • Acondicionamiento físico: Incentiva la actividad física y la incorporación de diseño para fomentar un estilo de vida más activo. 

  • Confort térmico y acústico: Se centra en la comodidad térmica evitando pérdidas energéticas y acústica mitigando los efectos nocivos del ruido, con el objetivo de mejorar la productividad y el bienestar.

  • Mente: Aborda la salud mental y el bienestar emocional, incluyendo estrategias para reducir el estrés y mejorar la satisfacción laboral.

En cuanto a su proceso de certificación, el certificado WELL requiere de la existencia de un Well Assesor, quien, asignado por el GBCI, además de tener una función de asesoramiento durante el proceso de certificación, será el encargado de llevar a cabo la visita final que determinará la consecución de la certificación.

Para lograr la certificación WELL, es necesario cumplir una cantidad de características suficiente. Sin embargo, en el caso de los espacios ocupados y en los proyectos de núcleo y envolvente, es necesario cumplir todas las precondiciones para obtener en nivel Plata. 

Además, los espacios o edificios deben ser recertificados como mínimo cada tres años, garantizando un control sobre el deterioro de las condiciones del edificio y evitando así que este deterioro afecte negativamente a la salud y bienestar de los ocupantes. A pesar de que cada sistema de evaluación se tenga en cuenta por separado y cada uno de ellos dispongan de unos criterios de evaluación diferentes, se trata de sistemas desarrollados para poderse implementar de manera conjunta a las edificaciones.
 

¿Cómo se integra el certificado WELL en los edificios con SATE?

El certificado WELL adquiere especial relevancia en los edificios con SATE. El SATE es un sistema de aislamiento térmico por el exterior que logra mejorar la eficiencia energética y el confort en los edificios. 

Así, la consecución del Certificado WELL en los edificios con SATE implica la combinación de estos dos enfoques complementarios: la eficiencia energética y el bienestar de los ocupantes. De esta manera, los edificios no sólo logran un mejor rendimiento ambiental y un considerable ahorro de recursos, sino que también proporcionan un ambiente interior saludable y confortable para sus habitantes

Las categorías WELL que se tienen en cuenta en los edificios con SATE son aquellas que están relacionadas con el aire y el confort interior, midiendo así factores como la seguridad de los materiales, el manejo de la humedad y de la infiltración de aire, la intrusión del ruido exterior y el ruido generado internamente.

Por su parte, los Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior (SATE) webertherm logran una calificación de 34 en el cumplimiento de estos requisitos, logrando en todos nuestros proyectos una construcción más sostenible, eficiente y centrada en el bienestar de las personas que habitan y trabajan en estos espacios. 

Sin duda, la certificación WELL building standard más que una tendencia, es una respuesta a la necesidad creciente de crear espacios saludables y sostenibles. La consecución de este certificado demuestra la apuesta por un sector de la construcción en el que el bienestar de las personas y el respeto por el medio ambiente son prioritarios.

Los edificios que cuentan con la certificación WELL además de las mejoras en el confort de las personas que los habitan, con evidencias en la disminución del estrés y aumento del bienestar, ven incrementado su valor en el mercado.

Weber, por su parte, participa activamente en la creación de nuevos y más exigentes estándares de calidad, apostando por certificaciones que avalan el compromiso medioambiental y demostrando que, empleando los productos y soluciones Saint-Gobain, es posible diseñar, construir y rehabilitar edificios sostenibles.