¿Placas de poliestireno para SATE o de lana mineral?

placas de poliestireno para sate

El Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior (SATE) se ha convertido en una solución cada vez más popular para mejorar la eficiencia energética de los edificios. Al tratarse de un sistema que se instala en la fachada de los edificios, ofrece innumerables ventajas en términos de aislamiento térmico y acústico, además de proteger la estructura contra factores climatológicos y mejorar el confort interior. Sin embargo, una de las decisiones cruciales a la hora de implementar un sistema SATE es la elección del material aislante. En este sentido, dos de las opciones más comunes son las placas de poliestireno para SATE y la lana mineral, pero, ¿cuáles son las características, ventajas y desventajas de cada una de estas opciones? ¿Qué diferencias hay entre ellas? Las analizamos y te contamos todo lo que necesitas saber.

Placas de poliestireno para SATE: Ligereza y eficiencia térmica

El poliestireno expandido (EPS) y el poliestireno extruido (XPS) son dos variantes del poliestireno que se utilizan frecuentemente en sistemas SATE. Ambos materiales comparten características como su ligereza, facilidad de instalación y excelentes propiedades de aislamiento térmico. El EPS, por ejemplo, se fabrica mediante la expansión de perlas de poliestireno con vapor, lo que resulta en un material con una estructura celular cerrada y llenas de aire. Gracias a esto, puede presumir de tener una baja conductividad térmica, convirtiéndose de esta manera en un excelente aislante.

El XPS, por otro lado, se produce mediante un proceso de extrusión, lo que le da una estructura más uniforme y cerrada, con mejores propiedades mecánicas y de resistencia a la compresión en comparación con el EPS. Esta mayor resistencia hace que el XPS sea ideal para aplicaciones donde el material está sujeto a cargas, como en suelos y cubiertas.

Una de las ventajas principales de las placas de poliestireno para SATE es su relación coste-beneficio. Es un material relativamente económico y ofrece un alto rendimiento térmico, lo que lo convierte en una opción atractiva para muchos proyectos de aislamiento ejecutados por empresas de construcción. Además, es fácil de cortar y manipular, lo que facilita su instalación en obras de diversa complejidad.

Nueva llamada a la acción

Lana mineral: Protección térmica y acústica superior

La lana mineral, que incluye tanto la lana de roca como la lana de vidrio, es otro material comúnmente utilizado en sistemas SATE. Este material se fabrica a partir de rocas volcánicas o vidrio reciclado, que se funden y se transforman en fibras mediante un proceso de hilado. La estructura fibrosa resultante proporciona excelentes propiedades de aislamiento térmico y acústico, además de una gran resistencia al fuego.

Una de las principales ventajas de la lana mineral es su comportamiento frente al fuego. Es un material incombustible que puede soportar temperaturas extremadamente altas sin descomponerse ni emitir gases tóxicos. Esto no solo mejora la seguridad en caso de incendio, sino que también puede contribuir a la obtención de certificaciones de sostenibilidad y eficiencia energética para los edificios.

Además, la lana mineral ofrece un excelente aislamiento acústico, reduciendo significativamente la transmisión de ruido tanto desde el exterior hacia el interior como entre distintas áreas dentro del edificio. Esta característica es especialmente valiosa en entornos urbanos o en edificaciones multifamiliares donde el control del ruido es esencial para el confort de los ocupantes.

Comparación y elección del material adecuado para un proyecto SATE

Para empresas de construcción, aplicadores y arquitectos, la decisión entre utilizar placas de poliestireno para SATE o lana mineral, debe basarse en una evaluación integral de las necesidades del proyecto y las condiciones específicas del entorno de la edificación. El poliestireno, con su ligereza, facilidad de manejo y coste relativamente bajo, puede ser la solución ideal para proyectos donde la eficiencia térmica y la economía son prioritarias.

Por otro lado, la lana mineral ofrece ventajas significativas en términos de seguridad contra incendios y aislamiento acústico, manteniendo la eficiencia térmica, características esenciales en proyectos donde estas propiedades son cruciales, como en edificios de gran altura o en zonas con alto nivel de ruido ambiental. Aunque su instalación puede ser un poco más compleja y costosa, las prestaciones superiores que ofrece en cuanto a aislamiento térmico y acústico, justifican esa inversión adicional que hay que hacer para contar con este tipo de placa.

 

Para asegurarse de tomar una decisión lo más acertada posible, recomendamos hacer un análisis detallado de los costes y beneficios de cada material, en el contexto específico del proyecto (porque cada proyecto es diferente y las necesidades o expectativas también son diferentes). Además, hay que considerar otros aspectos relevantes como la normativa local, certificaciones de eficiencia energética y sostenibilidad, las condiciones climáticas de la zona en la que se va a ejecutar el proyecto, etc.

Para todo esto, lo mejor es contar con expertos en aislamiento y construcción como nosotros. Ambos materiales ofrecen ventajas significativas, pero sus características distintivas pueden hacer que uno sea más adecuado que el otro en diferentes escenarios. Por tanto, es fundamental conocer todos los factores y contactar con nosotros, para saber qué opción es más adecuada en tus proyectos de construcción.