A lo largo de su existencia ha ido ampliando su gama de productos siempre con un mismo denominador común, la calidad de sus fabricados al servicio de sus clientes. En 1982 entró a formar parte del grupo francés weber et broutin, líder europeo en morteros industriales.
Desde entonces, Weber ha ido creciendo paulatinamente en el mercado de la construcción, hasta llegar en la actualidad, a los 13 centros de fabricación repartidos a nivel nacional.